El otoño es para muchos la llegada del frío, pero para otros
es muy llamativo. Por ejemplo: si vais a la montaña en otoño, seguramente os
sorprenderéis porque todo el bosque estará lleno de colores calientes, de
bellotas y de coloridos frutos.
También porque si miráis una montaña no muy de lejos, pero
no cerca podréis ver la montaña ligeramente verde, amarilla, roja, naranja…
Se podría decir que el otoño es tan colorido como la
primavera; no tiene tanta variedad de colores, pero sí una gran variedad de
tonos: rojizos, amarillentos o anaranjados.
No sólo se pueden ver tonos anaranjados o rojizos en los árboles,
sino que también se pueden ver en el suelo gracias a las hojas de los árboles
que ya viejas caen al suelo con esos llamativos tonos de naranja, rojo, amarillo...
O incluso en el cielo, no sólo en otoño sino cualquier día o
estación del año, en las nubes se puede observar el reflejo del Sol
desapareciendo, lo que produce esos preciosos colores que muchos habréis visto
en el cielo alguna vez, al atardecer.
Y, además, en Suiza y Alemania se celebra mucho y muy
alegremente la llegada del otoño haciendo una Herbstfest. ¿Qué es una Herbstfest? Pues es una fiesta de
la llegada del otoño y se hace en octubre.
Herbstfest significa
la fiesta del otoño en alemán.
A veces un pueblo decide hacer una Herbstfest en la que
siempre te puedes encontrar con concursos de pelar calabazas, un mercadillo,
juegos, cuentacuentos, talleres, un catering, animales, etc.
Como podéis ver no solo la primavera es colorida, si no que
el otoño también lo puede ser.
¿Os animáis a hacer una pequeña excursión en busca del otoño?
Marina: tres en suiza.
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